Si todavía estamos a tiempo por Navidad queremos una novia que nos coma la polla tan bien como lo hace esta pedazo de cerda. La tía tendrá cara de friki y estará un poco gorda, pero el esfuerzo que le pone en la mamada tragándose la polla hasta el fondo, hasta notar los huevos en su cara, es enorme. La guarra está chupando un buen rato con las tetas al aire hasta que en un momento sin esperarlo su pareja se le corre encima y le deja toda la cara llenísima de semen mientras ella se relame y prueba la leche.
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